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Existe la idea de que si tenemos ERGE o reflujo ácido significa que tenemos demasiado ácido en el estómago.
Y esta idea es fuertemente impulsada por las compañías farmacéuticas que ganan bastante dinero con los antiácidos y bloqueadores de ácido (conocidos como IBP), durante el resto de la vida de una persona.
Sin embargo, estos sólo ofrecen una solución temporal y, a largo plazo, empeoran el problema.
Esto se debe a que no son los niveles altos de ácido estomacal los que causan el reflujo ácido y la ERGE, sino exactamente lo contrario: muy poco ácido estomacal. De hecho, no existe ninguna investigación que demuestre que el nivel alto de ácido estomacal sea una causa.
Si ha leído este artículo , entonces sabrá algo sobre la importancia del ácido del estómago.
Sin él, no obtendríamos los nutrientes de los alimentos que comemos, sin importar cuánto comamos, lo que provocaría pérdida de masa muscular, niveles bajos de hormonas, poca energía y niveles inmunológicos bajos.
Además, las bacterias dañinas prosperarían en los intestinos, el estómago y nuestro cuerpo, causando inflamación, falta de energía, robo de los nutrientes que necesitan las células, letargo y más.
Y, por supuesto, tenemos ERGE, reflujo ácido, gases e hinchazón.
Cuando comemos, nuestro estómago secreta enzimas y ácidos digestivos. Estos son necesarios para descomponer los alimentos en una forma que las células puedan usar, descomponer los minerales para que puedan usarse y eliminar bacterias, virus, hongos y parásitos dañinos que ingresan a través de los alimentos y el agua.
Todos estos son muy importantes.
Ahora bien, existe algo llamado escala de PH, que va del 1 al 15, siendo 1 el más ácido y 15 el menos ácido.
El estómago secreta ácidos hasta que alcanza un ph de aproximadamente 1 o 2 (muy ácido). Llegar a este punto indica que la comida está lista para pasar al intestino delgado, que se abre para dejarla entrar.
Sin embargo, si el estómago no alcanza este nivel, entonces la comida puede permanecer en el estómago por más tiempo y volverse rancia (si bebes leche y luego la miras en el estómago, parecerá requesón, ya no leche).
Cuando se vuelve rancio, puede comenzar a burbujear y llegar al esófago. Mientras que el estómago está hecho para soportar un ambiente muy ácido, el esófago no, por lo que arde.
Puede empeorar tanto que la válvula entre el estómago y el esófago se degrada y puede comenzar a dejar entrar ácido con o sin comida en el estómago simplemente porque se acostó o se inclinó.
Pero hace más que eso.
La escala PH no es una escala recta hacia arriba. Aumenta en múltiplos de 10. Entonces un ph de 2 es 10 veces menos ácido que un ph de 1. Y un ph de 3 es 10 veces menos ácido que un ph de 2, o 100 veces menos ácido que un ph de 1 Luego, cuando vemos que hoy en día muchas personas tienen un ph de 4 o 5 (entre 1.000 y 10.000 veces menos ácido de lo necesario), vemos lo fácil que es que se produzca reflujo ácido.
Así que mira esto. Se supone que debe ser aproximadamente 1 o 2 para eliminar todas las bacterias dañinas y descomponer completamente los alimentos y minerales para que puedan usarse. Pero si es de 4 o 5, esto es entre 1.000 y 10.000 veces menos de lo que se necesita aquí.
Hasta que esto se solucione y el nivel de ph se reduzca a un ambiente más ácido, la ERGE, la acidez de estómago y el reflujo ácido continuarán, sin importar cuántas pastillas tome. Y las pastillas lo empeorarán.
Esto también hace que las bacterias lleguen al intestino delgado, donde echan raíces, se comen la comida y, a cambio, producen gases que te hinchan. También causan inflamación que puede provocar dolor de estómago o incluso dolor en los músculos cuando estas bacterias ingresan al torrente sanguíneo.
También deja pasar los parásitos, que echarán raíces.
Y puede llegar a ser tan grave que el estómago mismo sea tan poco ácido que las bacterias puedan empezar a vivir allí, descomponer las células de las paredes del estómago y causar muchos más problemas.
Los antiácidos actúan neutralizando el ácido del estómago y elevando así el nivel de ph. Esto luego alivia el dolor de la acidez de estómago o ERGE, ya que es menos ácido. Pero también deja pasar estas bacterias dañinas y previene la degradación de los alimentos, incluida la degradación de las proteínas .
Y el ácido del estómago está formado por... los aminoácidos de las proteínas. Si no se descomponen por completo, entonces el cuerpo no puede usarlos para producir más ácido estomacal y con el tiempo obtenemos una disminución continua de la producción de ácido estomacal, lo que lleva a un ambiente cada vez menos ácido, por lo que tomamos aún más antiácidos.
Los bloqueadores de ácido o IBP son un poco diferentes. PPI significa inhibidores de la bomba de protones. Las bombas de protones son las glándulas que secretan el ácido del estómago.
Los IBP funcionan envenenándolos para que produzcan menos ácido, por lo que literalmente no pueden funcionar como se supone que deben hacerlo.
Ahora bien, si alguien tiene algo así como una úlcera sangrante, una herida real en el estómago, esto puede ser necesario ya que necesitamos reducir los niveles de ácido para que la herida tenga la posibilidad de sanar.
Pero una vez que haya sanado, debemos eliminarlos y volver a aumentar los niveles de ácido del estómago o nos causaremos muchos más problemas que una simple herida en el estómago.
Como los IBP funcionan envenenando las glándulas que secretan ácido, durante un largo período de tiempo estas glándulas pueden dañarse tanto que incluso cuando dejamos de tomar los IBP, las glándulas tardan mucho en sanar para que produzcan ácido adecuadamente. Cuanto más tiempo hayamos estado tomando IBP, más tardarán las glándulas en sanar, si es que pueden hacerlo por completo en ese momento.
Entonces esto es muy importante. Tómelos sólo cuando realmente los necesite, no más.
Si tenemos reflujo ácido, acidez estomacal o ERGE, entonces tenemos niveles más bajos de ácido estomacal. Período.
Entonces, primero debemos eliminar los bloqueadores de ácido, los antiácidos e incluso el agua con gas, que también reduce la acidez.
Luego debemos comenzar a tomar enzimas digestivas para proporcionar el ácido y las enzimas del estómago que el estómago necesita para descomponer completamente los alimentos y eliminar las bacterias y los parásitos que ingresan. Porque si tenemos una de las situaciones anteriores, entonces ya sabemos que no tenemos suficiente.
A continuación, debemos comenzar a consumir más proteínas y tomar enzimas para asegurarnos de que se descompongan por completo para que el cuerpo pueda usarlas, ya que es la proteína que el cuerpo usa para producir más ácido estomacal y enzimas digestivas. Si no lo hacemos, la situación continuará indefinidamente.
Este es también un lugar donde PerfectAmino se vuelve muy importante. No sólo proporciona los aminoácidos de las proteínas necesarios para producir más enzimas y ácido estomacal, sino que también ayuda a curar las células dañadas por los efectos del bajo nivel de ácido estomacal.
Para el reflujo ácido, la acidez estomacal y la ERGE, PerfectAmino y las enzimas digestivas son una combinación muy ganadora. Te recomiendo encarecidamente que los consultes.
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Anyone who works out, runs, bikes or does any type of intense exercise, knows about DOMS — Delayed Onset Muscle Soreness.
This is the soreness you feel not right after a workout or exercise, but 24-48 hours later.
At one point it was thought this was caused by lactic acid build up, but this isn’t the case.
Lactic acid is an acid that starts to build up just before we reach our VO2 Max and can’t go any further in our exercise or workout. (VO2 Max is literally the Maximum amount, or Volume, of Oxygen (O2) that your cells can utilize during intense exercise, before you burn out.)
But lactic acid actually helps you. Your body can metabolize it (burn it and use it as fuel).
So what really causes DOMS? And how can we prevent it or lessen it?
Let’s see.
The body requires all kinds of nutrients, minerals, and vitamins for optimum health. And in the Standard American Diet (SAD), none are more deficient than Omega-3 fatty acids.
An array of critical bodily processes are dependent on these fats for proper function, particularly in the immune system and brain.
When it comes to eating healthy fats and oils, most people don't realize that the ratio of the right kinds of fats is really important.
Most experts agree that a ratio of 3:1 or 4:1 of Omega-6 to Omega-3 is ideal, but the average American intake is more like 20:1 – over ten times more than needed.
Unfortunately, many of our sources for healthy Omega-3s are poor, degraded by modern food manufacturing processes, by our polluted environment, and by the lack of choices available in restaurants and grocery stores. Unless you're paying vigilant attention to your dietary fat intake, you're probably out of balance.
You probably need more Omega-3s.
This is where supplementation can make all the difference.
At BodyHealth, we've put together the most advanced, high-quality Omega-3 supplement available to optimize your brain health: Omega-3 Health.
We know about amino acids, hormones, and how different foods affect our ability to build lean muscle, burn fat and stay healthy.
But if we want to achieve maximum levels of energy, recovery, health and performance, and build the most lean muscle, then we need to go down to the cellular level.
After all, our bodies are just one big mass of some 100 trillion cells all bonded together.
How well we're doing is an exact reflection of how well our cells are doing.
And they require a multitude of nutrients and biochemicals, all held in equilibrium, to ensure they can work properly, produce energy, build muscle, and keep our body going.
When these aren't properly balanced we can get headaches, brain fog, low levels of energy, muscle cramps, slower recoveries from workouts, and imbalances in hormones.
But when everything is in place, we have the most powerful you that you can be.
So let’s see how this works.